POLLO EN SALSA DE MANGO Y UNA PINTA
Con el pasar de los años a veces creo que toda mi vida es como si la hubiera leído en un libro o visto a través de una pantalla. Alguna vez leí que hay que ser un adulto del cual no te avergonzarías cuando eras niño; pero en realidad no recuerdo muy bien cuando fui niño, tal vez por esto siento esa alienación de mi existencia, sin embargo también a partir del Yakeismo también he desarrollado la aceptación de la situación, y es que uno de los grandes problemas que desarrollamos como humanos es el egoísmo y son nuestras pasiones egoístas las que nos pueden convertir en "Villanos". Bajo esta premisa alguna vez discutí sobre los villanos en el sentido clásico y no clásico de la literatura; de esta discusión surgió la frase "Todo villano en su interior es un Héroe". Entonces si nos damos cuenta, las personas que conocemos y que en algún momento pasan a ser los "villanos" de nuestras vidas, en realidad son personas que no siguieron nuestro libreto y que atienden también a su ser egoísta. La persona que te traiciona, la que te miente o la que te abandona, no son malas, no son la bruja del cuento ni el lobo feroz, son humanos como tú, humanos egoístas que quieren tener el control, así una persona que no pasa pensión o que abandona a los hijos, son personas sumidas en el egoísmo, muchos dirán que la ociosidad es la madre de todos los vicios, pero el egoísmo es su padre, si nos sentamos a analizar todos los problemas del mundo son por ego, el ser mejor el ser el único, el ser el primero. Así nos reza el consumismo; y conste que no digo que están mal las posesiones, lo malo es que al dejar que nuestra vena del "YO" nos gane entonces dejamos de observar y escuchar a nuestro prójimo, dejamos de ver el impacto ambiental que nuestros actos tienen y dejamos de pensar en las futuras generaciones, ni que decir de las actuales que mueren de hambre y miseria, así desde lo grande hasta lo mínimo el motor de la miseria humana es la incapacidad de percibir nuestra realidad compartida por otros seres, ahí la sabiduría de algunos pueblos antiguos debe hacer eco en nuestras existencias, debemos comprender primero, cuan diminutos somos, y que "somos parte de un todo, pero no lo somos todo; de igual forma que tu mano es una parte tuya pero tu mano no es todo tu cuerpo, ni representa toda tu existencia"
Y esperando a que todos podamos darnos cuenta y hacer consciencia... beberé una pinta de vino mientras degusto una pechuga de pollo en salsa de mango...
Y esperando a que todos podamos darnos cuenta y hacer consciencia... beberé una pinta de vino mientras degusto una pechuga de pollo en salsa de mango...